Este invierno, CHANEL transforma sus símbolos más emblemáticos en una constelación de regalos olfativos. El león, la camelia, el cometa, el trigo y las perlas se reimaginan bajo un cielo estrellado para guiar la búsqueda del obsequio perfecto, dando vida a una selección de fragancias y aceites corporales que celebran el poder, la armonía, la prosperidad y la luz.


Bajo el concepto The Enchanted Symbols, la Maison propone un recorrido sensorial donde cada talismán revela su energía a través de creaciones icónicas. El cometa, símbolo de audacia y destino, inspira N°5 The White Gold Body Oil, un aceite corporal luminoso que hidrata intensamente la piel mientras la envuelve en las notas sensuales del bouquet floral abstracto de N°5. Sus partículas nacaradas en tonos blanco dorado iluminan la piel con un resplandor sutil. Presentado en un frasco de 250 ml, esta edición limitada invita a prolongar la estela de la fragancia con un gesto generoso.

Las perlas, emblema de elegancia y feminidad, se traducen en COCO MADEMOISELLE Pearly Body Oil. Esta fórmula voluptuosa deja la piel suave como un velo satinado y la perfuma con la firma vibrante y ambarina de la fragancia: cítricos luminosos, flores delicadas y un fondo de patchouli sofisticado. Su frasco de cristal revela el brillo iridiscente de las perlas en suspensión, convirtiéndolo en un objeto tan bello como sensorial.


La constelación se completa con fragancias icónicas vestidas para la temporada. N°5, COCO MADEMOISELLE y CHANCE EAU SPLENDIDE se presentan en fundas blancas nacaradas con acentos dorados y plateados, mientras que BLEU DE CHANEL y ALLURE HOMME SPORT adoptan un elegante sleeve azul profundo con destellos metálicos.

Una propuesta que convierte el arte de regalar en un ritual encantado, donde los símbolos de CHANEL iluminan el invierno con elegancia atemporal.