No es ningún secreto: la tecnología avanza a pasos agigantados y, con ello, los grandes fabricantes de este sector compiten para cautivar a los usuarios con equipos que ofrecen cada vez más y mejores funcionalidades, diseños disruptivos y procesadores más rápidos.
A ver, independientemente de que prefieras el ecosistema que ofrece Windows de Microsoft o si eres fan de la practicidad que nos brinda iOS de Apple, vale la pena voltear a ver qué es lo que está haciendo cada uno. Y la verdad, estos dos equipos están dando de qué hablar.
Microsoft Surface Laptop Studio 2
Por un lado, tenemos la Microsoft Surface Laptop Studio 2, con un diseño desafiante para lo que se espera de una laptop. No es precisamente ligera, pero a cambio nos ofrece un sistema de bisagra que nos permite, en tan solo un par de segundos, pasar de su modo laptop a su modo tablet. Voilà, dos en uno.
Nos brinda un procesador Intel® Core™ clase H de 13ª generación basado en la plataforma Intel® Evo™. También está equipada con las últimas GPU NVIDIA® y rendimiento impulsado por IA. ¿Qué significa todo esto? Que tendrás dos veces más potencia, dos veces más rendimiento gráfico y, por lo tanto, una experiencia fluida y gráficos más realistas.
Esta compu te permite realizar varias tareas a la vez y está dotada con una capacidad de almacenamiento para nada despreciable de hasta 64 GB de RAM y un disco de estado sólido (SSD) de hasta 2 TB. Sus gráficos NVIDIA de última generación funcionan a la perfección para agilizar las tareas de edición, diseño y juegos de última generación.
Si lo tuyo es el diseño y/o el dibujo, no tendrás nada que reprocharle a su nuevo touchpad háptico de precisión ni a su panel táctil. Puedes dibujar, escribir y hacer bocetos con ayuda de su Surface Slim Pen 2.
Su pantalla táctil PixelSense™ Flow de 14,4” da como resultado imágenes más brillantes y vibrantes, con colores más apegados a la realidad y una frecuencia de actualización de hasta 120 Hz, lo que brinda mayor fluidez en las imágenes y es especialmente atractivo para quienes buscan una experiencia de juego más completa.
Además, esta computadora portátil ofrece algunas funcionalidades de inteligencia artificial, como su campo de visión mejorado con contacto visual (para las llamadas de Microsoft Teams), desenfoque de fondo y encuadre automático.
MacBook Pro
Por otro lado, está la MacBook Pro, que, la verdad, en cuanto a diseño prácticamente no presenta ninguna novedad, pero sin duda es un referente cuando se habla de potencia y practicidad. Es ligera y es bonita.
Está equipada con una cámara nada despreciable de 1080p que responde bastante bien ante distintas condiciones de luz, tres micrófonos con cancelación de ruido y dos woofers. De primera mano te lo diré: la calidad audio de estas computadoras es sencillamente increíble.
Aunque desde hace algunos años Apple no utiliza más los procesadores de Intel, han encontrado la manera de producir sus propios procesadores para así también incorporarse a esta cuasi carrera espacial. El chip M3 es perfecto para multitasking, incluso durante las videollamadas, y además promete un buen desempeño en videojuegos (lo cual es bastante llamativo, pues la verdad, cuando pensábamos en gaming de ordenador, el ecosistema que ofrecía una Mac, MacBook o una iMac en cualquiera de sus variantes, no solía ser lo primero que se nos venía a la mente).
Como ya es costumbre entre los modelos MacBook, viene en dos presentaciones: con 14 y 16 pulgadas en su pantalla y XDR (o rango dinámico extremo), que ofrece un gran nivel de detalle en luces y sombras con colores súper vibrantes y realistas.
Difícil decisión
No se trata de elegir la más potente y ya, sino de decidir en función de para qué la vas a usar. ¿Edición de video? ¿Procesamiento de imágenes? ¿Código? ¿Productividad? ¿Labores de oficina básicas? Ojo, cualquiera de estas sirve perfecto para realizar presentaciones, navegar en YouTube o stalkear a tu ex usar redes sociales. Pero si te dedicas a la labor creativa o al gaming, puede que quieras pensarlo mejor. Decidir entre Apple y Microsoft es una decisión importante: ¿Touch ID o reconocimiento facial? ¿Portabilidad y ligereza o diseño flexible y estéticamente futurista? Tú decides cuál gana este round.
Por Omar S. Aguilera